Un soldado muere tras ser golpeado en el cuartel
“Cómo vamos a confiar ahora a nuestros hijos cuando vayan al cuartel, si un sargento ha matado a mi hijo”. Con esta frase, la madre de Juan Carlos Morales (19), Lucía Ticona, reclamó, con lágrimas en los ojos, el cadáver de su hijo que yacía, todavía vestido con su uniforme camuflado, en la morgue del Hospital de Clínicas en la ciudad de La Paz.
Juan Carlos pereció la madrugada de ayer luego de ser presuntamente golpeado por el sargento de guardia e instructor Valerio Valencia Espinoza, al percatarse que Morales se habría dormido al realizar el servicio de guardia en el cuartel del Gada 91 de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) de la ciudad de El Alto.
Según declaraciones de los familiares de la víctima, el sargento Valencia habría confesado “haberlo pateado”. Sin embargo, el informe forense, emitido ayer, determinó que el conscripto murió después de que un riñón y la vejiga reventaran, presuntamente por causa de patadas propinadas por el militar en el cuerpo del soldado Morales.
El informe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de El Alto (FELCC) indica que a la media noche del miércoles, los soldados se preparaban en el patio de honor del Gada 91 para el Centinela de Guardia, sin embargo, el sargento Valencia golpeó a Morales cuando éste se dormía, supuestamente.
Casi dos horas después, un fuerte dolor en el estómago obligó a Morales a acudir a la Sanidad del Gada 91, donde le dijeron que se traslade hasta el centro médico Prosalud, pero, según los familiares, el estado de salud del soldado era más grave, por lo que aconsejaron que lo llevaran de urgencia al Hospital Boliviano Holandés (El Alto), “pero murió en el camino”, relató su hermana, Janette Morales.
“Una noche, un sargento ya lo habría jaripeado y yo le decía: ‘es el cuartel hijo, así siempre jaripean, tienes que llegar hasta cabo’”, recordó su madre.
Juan Carlos ingresó al cuartel en enero de este año. “Le decían que vaya al cuartel porque era muy tranquilo; mi hermano mayor le decía que si entraba, sería fuerte como los militares”, dijo Janette, en puertas de la morgue.
El conscripto era el menor de cinco hermanos, nació en La Paz y vivía en El Alto. “Él medía 1,75 metros y nos decía que era uno de los mejores soldados, creo que era porque su estatura le favorecía”, manifestó la hermana.
Según los familiares, el supuesto sargento agresor se encuentra detenido y la FAB se habría comprometido en darles una indemnización.
Fuentes del Tribunal Permanente de Justicia Militar informaron que este caso deberá ser investigado en esta instancia judicial y posiblemente se instaure un sumario informativo. En 15 días se iniciaría dicho proceso.
Anoche, el ministro de Defensa, Walker San Miguel, descartó un “criterio de encubrimiento” en este caso y afirmó su interés por “sancionar al responsable”. Dijo que iría al velorio del conscripto y anunció que el Estado recompensará a los familiares.
El defensor del Pueblo, Waldo Albarracín, condenó la muerte de Morales y pidió que el sargento Valencia sea juzgado por el delito de homicidio, sin importar la jurisdicción legal
Hizo referencia a las normas militares y de derechos humanos que prohíben castigos físicos, que se constituyen en un delito que debe ser sancionado.
EL PERFIL
Inicios • Juan Carlos Morales, de 19 años de edad, nació en La Paz y estudió hasta tercero de secundaria en el colegio Juan Capriles de El Alto, donde vivía.
Cuartel • En enero del 2008 ingresó al Gada 91 de la FAB. Soñaba con ser cabo, como su hermano. Orgulloso, contaba a su familia de su estatura, 1,75 metros, que lo distinguía.
Juan Carlos pereció la madrugada de ayer luego de ser presuntamente golpeado por el sargento de guardia e instructor Valerio Valencia Espinoza, al percatarse que Morales se habría dormido al realizar el servicio de guardia en el cuartel del Gada 91 de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) de la ciudad de El Alto.
Según declaraciones de los familiares de la víctima, el sargento Valencia habría confesado “haberlo pateado”. Sin embargo, el informe forense, emitido ayer, determinó que el conscripto murió después de que un riñón y la vejiga reventaran, presuntamente por causa de patadas propinadas por el militar en el cuerpo del soldado Morales.
El informe de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen de El Alto (FELCC) indica que a la media noche del miércoles, los soldados se preparaban en el patio de honor del Gada 91 para el Centinela de Guardia, sin embargo, el sargento Valencia golpeó a Morales cuando éste se dormía, supuestamente.
Casi dos horas después, un fuerte dolor en el estómago obligó a Morales a acudir a la Sanidad del Gada 91, donde le dijeron que se traslade hasta el centro médico Prosalud, pero, según los familiares, el estado de salud del soldado era más grave, por lo que aconsejaron que lo llevaran de urgencia al Hospital Boliviano Holandés (El Alto), “pero murió en el camino”, relató su hermana, Janette Morales.
“Una noche, un sargento ya lo habría jaripeado y yo le decía: ‘es el cuartel hijo, así siempre jaripean, tienes que llegar hasta cabo’”, recordó su madre.
Juan Carlos ingresó al cuartel en enero de este año. “Le decían que vaya al cuartel porque era muy tranquilo; mi hermano mayor le decía que si entraba, sería fuerte como los militares”, dijo Janette, en puertas de la morgue.
El conscripto era el menor de cinco hermanos, nació en La Paz y vivía en El Alto. “Él medía 1,75 metros y nos decía que era uno de los mejores soldados, creo que era porque su estatura le favorecía”, manifestó la hermana.
Según los familiares, el supuesto sargento agresor se encuentra detenido y la FAB se habría comprometido en darles una indemnización.
Fuentes del Tribunal Permanente de Justicia Militar informaron que este caso deberá ser investigado en esta instancia judicial y posiblemente se instaure un sumario informativo. En 15 días se iniciaría dicho proceso.
Anoche, el ministro de Defensa, Walker San Miguel, descartó un “criterio de encubrimiento” en este caso y afirmó su interés por “sancionar al responsable”. Dijo que iría al velorio del conscripto y anunció que el Estado recompensará a los familiares.
El defensor del Pueblo, Waldo Albarracín, condenó la muerte de Morales y pidió que el sargento Valencia sea juzgado por el delito de homicidio, sin importar la jurisdicción legal
Hizo referencia a las normas militares y de derechos humanos que prohíben castigos físicos, que se constituyen en un delito que debe ser sancionado.
EL PERFIL
Inicios • Juan Carlos Morales, de 19 años de edad, nació en La Paz y estudió hasta tercero de secundaria en el colegio Juan Capriles de El Alto, donde vivía.
Cuartel • En enero del 2008 ingresó al Gada 91 de la FAB. Soñaba con ser cabo, como su hermano. Orgulloso, contaba a su familia de su estatura, 1,75 metros, que lo distinguía.
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