Denuncian que paraguayas son explotadas en un club nocturno
El rescate de cuatro mujeres paraguayas, retenidas el lunes por la justicia en el aeropuerto Silvio Pettirossi de AsunciĆ³n, cuando se aprestaban a viajar a Santa Cruz de la Sierra, puso al descubierto el funcionamiento de una red internacional de traficantes de personas con fines de explotaciĆ³n sexual, segĆŗn la prensa guaranĆ que informa de que unas 200 jĆ³venes de ese paĆs son obligadas a prostituirse en un club nocturno de la capital cruceƱa.
En la operaciĆ³n en la terminal aĆ©rea asunceƱa, en la que intervino la fiscal Teresa MartĆnez, a juzgar por el diario La NaciĆ³n, se detuvo a dos abogadas y a un individuo, todos paraguayos, que supuestamente reclutaban a las mujeres y les financiaban el traslado a Bolivia. El caso saliĆ³ a la luz gracias a una de las damas que se arrepintiĆ³ a Ćŗltima hora y avisĆ³ a la PolicĆa, que preparĆ³ la intervenciĆ³n, conforme al diario paraguayo.
Un pedido de informes sobre cuentas bancarias y movimientos de dinero de los tres imputados por el delito de trata de personas con fines de explotaciĆ³n sexual serĆ” realizado por la FiscalĆa a fin de corroborar la informaciĆ³n sobre los nexos entre paraguayos y bolivianos componentes de la red delictiva.
La nota en la versiĆ³n digital del periĆ³dico La NaciĆ³n refiere que el jefe de la ‘poderosa’ red de traficantes es M.C., alias ‘SatanĆ”s’, aparentemente dueƱo del local nocturno situado en la avenida Cristo Redentor. SegĆŗn la investigaciĆ³n de la fiscal MartĆnez, algunas de las chicas explotadas en dicha discoteca deben brindar ‘servicios de gentileza’ a policĆas, agentes de Interpol y funcionarios de MigraciĆ³n para evitar las inspecciones en el boliche y la situaciĆ³n legal de las meretrices extranjeras, que llegan con promesas de buenos ingresos econĆ³micos, pero son forzadas a ‘vender’ su cuerpo al ser agobiadas con pesadas deudas.
Reporteros del diari cruceƱos El Deber, visitaron ayer el club nocturno en cuestiĆ³n con la finalidad de obtener la versiĆ³n del dueƱo. En el recinto, una funcionaria manifestĆ³ que el hombre no se encontraba en ese momento y que su horario habitual de trabajo es partir de las 21:00 adelante, pues el exclusivo local funciona de noche.
En MigraciĆ³n, la directora, MarĆa Paula Ferrufino, informĆ³ a travĆ©s de su personal de que no podĆa atender a los medios por una apretada agenda de trabajo. Del mismo modo, Edwin FernĆ”ndez, jefe de InspectorĆa, consultĆ³ una posible respuesta con Ferrufino y luego manifestĆ³ que le era imposible hablar sobre el caso por sus labores.
Las sindicaciones sobre explotaciĆ³n sexual contra este club nocturno y su dueƱo no es novedad, pues el 10 de junio MigraciĆ³n intervino Ć©ste y otro local, y detuvo en la madrugada a 26 mujeres, la mayorĆa paraguayas que trabajaban como bailarinas y meretrices con visa de turistas, lo cual es ilegal.
En esa oportunidad MigraciĆ³n multĆ³ con Bs 33.500 a uno de estos centros y con Bs 1.000 a otro, por permitir la irregularidad.
En septiembre de 2006, Marcos C. declarĆ³ ante el fiscal GermĆ”n Quezada, en Interpol, por el presunto delito de trĆ”fico de mujeres paraguayas para traerlas a su boliche.
Esa vez negĆ³ las acusaciones, pese a que su funcionario, el ex mayor de PolicĆa Jorge Antonio Cortez, cayĆ³ preso en Paraguay por trata de personas.
En la operaciĆ³n en la terminal aĆ©rea asunceƱa, en la que intervino la fiscal Teresa MartĆnez, a juzgar por el diario La NaciĆ³n, se detuvo a dos abogadas y a un individuo, todos paraguayos, que supuestamente reclutaban a las mujeres y les financiaban el traslado a Bolivia. El caso saliĆ³ a la luz gracias a una de las damas que se arrepintiĆ³ a Ćŗltima hora y avisĆ³ a la PolicĆa, que preparĆ³ la intervenciĆ³n, conforme al diario paraguayo.
Un pedido de informes sobre cuentas bancarias y movimientos de dinero de los tres imputados por el delito de trata de personas con fines de explotaciĆ³n sexual serĆ” realizado por la FiscalĆa a fin de corroborar la informaciĆ³n sobre los nexos entre paraguayos y bolivianos componentes de la red delictiva.
La nota en la versiĆ³n digital del periĆ³dico La NaciĆ³n refiere que el jefe de la ‘poderosa’ red de traficantes es M.C., alias ‘SatanĆ”s’, aparentemente dueƱo del local nocturno situado en la avenida Cristo Redentor. SegĆŗn la investigaciĆ³n de la fiscal MartĆnez, algunas de las chicas explotadas en dicha discoteca deben brindar ‘servicios de gentileza’ a policĆas, agentes de Interpol y funcionarios de MigraciĆ³n para evitar las inspecciones en el boliche y la situaciĆ³n legal de las meretrices extranjeras, que llegan con promesas de buenos ingresos econĆ³micos, pero son forzadas a ‘vender’ su cuerpo al ser agobiadas con pesadas deudas.
Reporteros del diari cruceƱos El Deber, visitaron ayer el club nocturno en cuestiĆ³n con la finalidad de obtener la versiĆ³n del dueƱo. En el recinto, una funcionaria manifestĆ³ que el hombre no se encontraba en ese momento y que su horario habitual de trabajo es partir de las 21:00 adelante, pues el exclusivo local funciona de noche.
En MigraciĆ³n, la directora, MarĆa Paula Ferrufino, informĆ³ a travĆ©s de su personal de que no podĆa atender a los medios por una apretada agenda de trabajo. Del mismo modo, Edwin FernĆ”ndez, jefe de InspectorĆa, consultĆ³ una posible respuesta con Ferrufino y luego manifestĆ³ que le era imposible hablar sobre el caso por sus labores.
Las sindicaciones sobre explotaciĆ³n sexual contra este club nocturno y su dueƱo no es novedad, pues el 10 de junio MigraciĆ³n intervino Ć©ste y otro local, y detuvo en la madrugada a 26 mujeres, la mayorĆa paraguayas que trabajaban como bailarinas y meretrices con visa de turistas, lo cual es ilegal.
En esa oportunidad MigraciĆ³n multĆ³ con Bs 33.500 a uno de estos centros y con Bs 1.000 a otro, por permitir la irregularidad.
En septiembre de 2006, Marcos C. declarĆ³ ante el fiscal GermĆ”n Quezada, en Interpol, por el presunto delito de trĆ”fico de mujeres paraguayas para traerlas a su boliche.
Esa vez negĆ³ las acusaciones, pese a que su funcionario, el ex mayor de PolicĆa Jorge Antonio Cortez, cayĆ³ preso en Paraguay por trata de personas.
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