Niñas golpeadas despiertan la solidaridad de la gente
Crimen: la gente se solidariza con las niñas obrevivientes El drama por el que atraviesan las niñas Evelyn y María, quienes permanecen internadas en el hospital pediátrico luego de ser cruelmente golpeadas por su padre, ha despertado la solidaridad de la población.
En un día, la OTB de Oronkota (Sacaba) recolectó más de 20 mil bolivianos. Ayer, el director técnico de Aurora, Julio César Baldivieso, hizo un donativo en efectivo y pidió también a las empresas y personas que aporten, porque las niñas necesitan ayuda de los cochabambinos.
En tanto, el acalde Edwin Castellanos anunció que se hace una colecta interna en el municipio para aportar a la recuperación de las niñas sobrevivientes.
En tanto, la Policía busca al asesino de María Claudia Flores Limachi (30) y de su hijo Máximo (10), en Argentina. El fiscal de Distrito, Camilo Medina, informó ayer que el autor está plenamente identificado: Raúl Sánchez, un argentino de padres bolivianos que viviría en la provincia argentina de Salta, quien además está acusado de intentar matar a las niñas Evelyn (8) y María (5), que pese a tener los cráneos destrozados se aferran a la vida.
Hay un equipo de fiscales que indaga el horrendo crimen y la Fiscalía de Distrito informó que se han “activado todos los mecanismos de cooperación” que existe con Argentina para capturar al principal sospechoso.
Medina explicó que además se han tomado muestras de piel, sangre y tejidos para acorralar al autor, que ya fueron enviadas a los laboratorios del Instituto de Investigaciones Forenses.
Aunque está claro que la madre y el hijo murieron con los cráneos destrozados, ayer, la Fiscalía reveló que el primero en morir fue el niño, Máximo.
El historial forense determinó que ambos murieron por un traumatismo encéfalo craneal. Pero, hay al menos una diferencia de seis horas entre el fallecimiento del niño y la madre, que se estableció a través de fenómenos como la rigidez cadavérica.
El Ministerio de Gobierno ha pedido a la Policía de Interpol rastrear al sospechoso fuera de Bolivia a través de las conexiones que existen con su similar en Argentina. También, se corrobora si Raúl Sánchez cruzó la frontera hacia Argentina y si utilizó su verdadera identidad.
La madre e hijo asesinados fueron encontrados el miércoles luego de que una vecina presintió que algo malo pasó con Claudia, porque no habría su puesto de venta que funcionaba todo el día hasta las 24:00.
Multitudinario entierro
Una multitud de personas despidió ayer a la madre e hijo, asesinados el Oronkota (Sacaba), el fin de semana. Su trágica partida despertó la solidaridad de una población que ayer se volcó de lleno al entierro.
También, llegaron familiares de Claudia Flores, unos desde Santa Cruz y otros de Potosí. Dijeron que varias veces le pidieron que se separa de Raúl Sánchez (31), pero siempre ponía de por medio a sus tres hijos.
Las dos sobrevivientes del crimen: Evelyn (8) y María (5) luchan por su vida.
La más pequeña que tenía el cráneo hundido por el golpe con combo que le dio su padre está en terapia intensiva tras someterse a una operación.
El director del hospital del niño Manuel Ascencio Villarroél, Vladimir Rojas, expresó que ella “está conectada a un ventilador, pero está estable.
Vamos a ver como evoluciona una vez que le saquen el ventilador. Se le ha reparado todo”.
Evelyn, que ya despertó del coma en que cayó tras la agresión, “está mejor, ella está en sala y reacciona bien. Tienen que estar hospitalizadas cinco días más, pero pueden ampliarse por el tema legal”, añadió Rojas.
En un día, la OTB de Oronkota (Sacaba) recolectó más de 20 mil bolivianos. Ayer, el director técnico de Aurora, Julio César Baldivieso, hizo un donativo en efectivo y pidió también a las empresas y personas que aporten, porque las niñas necesitan ayuda de los cochabambinos.
En tanto, el acalde Edwin Castellanos anunció que se hace una colecta interna en el municipio para aportar a la recuperación de las niñas sobrevivientes.
En tanto, la Policía busca al asesino de María Claudia Flores Limachi (30) y de su hijo Máximo (10), en Argentina. El fiscal de Distrito, Camilo Medina, informó ayer que el autor está plenamente identificado: Raúl Sánchez, un argentino de padres bolivianos que viviría en la provincia argentina de Salta, quien además está acusado de intentar matar a las niñas Evelyn (8) y María (5), que pese a tener los cráneos destrozados se aferran a la vida.
Hay un equipo de fiscales que indaga el horrendo crimen y la Fiscalía de Distrito informó que se han “activado todos los mecanismos de cooperación” que existe con Argentina para capturar al principal sospechoso.
Medina explicó que además se han tomado muestras de piel, sangre y tejidos para acorralar al autor, que ya fueron enviadas a los laboratorios del Instituto de Investigaciones Forenses.
Aunque está claro que la madre y el hijo murieron con los cráneos destrozados, ayer, la Fiscalía reveló que el primero en morir fue el niño, Máximo.
El historial forense determinó que ambos murieron por un traumatismo encéfalo craneal. Pero, hay al menos una diferencia de seis horas entre el fallecimiento del niño y la madre, que se estableció a través de fenómenos como la rigidez cadavérica.
El Ministerio de Gobierno ha pedido a la Policía de Interpol rastrear al sospechoso fuera de Bolivia a través de las conexiones que existen con su similar en Argentina. También, se corrobora si Raúl Sánchez cruzó la frontera hacia Argentina y si utilizó su verdadera identidad.
La madre e hijo asesinados fueron encontrados el miércoles luego de que una vecina presintió que algo malo pasó con Claudia, porque no habría su puesto de venta que funcionaba todo el día hasta las 24:00.
Multitudinario entierro
Una multitud de personas despidió ayer a la madre e hijo, asesinados el Oronkota (Sacaba), el fin de semana. Su trágica partida despertó la solidaridad de una población que ayer se volcó de lleno al entierro.
También, llegaron familiares de Claudia Flores, unos desde Santa Cruz y otros de Potosí. Dijeron que varias veces le pidieron que se separa de Raúl Sánchez (31), pero siempre ponía de por medio a sus tres hijos.
Las dos sobrevivientes del crimen: Evelyn (8) y María (5) luchan por su vida.
La más pequeña que tenía el cráneo hundido por el golpe con combo que le dio su padre está en terapia intensiva tras someterse a una operación.
El director del hospital del niño Manuel Ascencio Villarroél, Vladimir Rojas, expresó que ella “está conectada a un ventilador, pero está estable.
Vamos a ver como evoluciona una vez que le saquen el ventilador. Se le ha reparado todo”.
Evelyn, que ya despertó del coma en que cayó tras la agresión, “está mejor, ella está en sala y reacciona bien. Tienen que estar hospitalizadas cinco días más, pero pueden ampliarse por el tema legal”, añadió Rojas.
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