Santa Cruz: Caen tres mozalbetes dedicados al roba desde temprana edad
La Policía capturó el martes a tres adolescentes, entre 16 y 17 años, implicados en robos a mano armada a transeúntes y a motociclistas en la capital cruceña y en el municipio de La Guardia, según fuentes oficiales.
El comandante de la fuerza del orden en Santa Cruz, Sabino Guzmán, manifestó en conferencia de prensa que dos hermanos, de 16 y 17 años, asaltaron con arma de fuego a un transeúnte en el barrio Kuljis y lo despojaron de sus pertenencias. La víctima avisó a la Policía de la radial 17 ½ y los capturaron en poder de una motocicleta, en la que cometían sus fechorías.
A Guzmán y a los investigadores de la Felcc les ha molestado el hecho de que el afectado por el robo firmó un acuerdo con los familiares de los menores infractores para retirar la demanda, lo cual debilitó la acción penal contra los autores, siendo que en la zona del octavo anillo y la ruta a La Guardia tiene otros casos pendientes.
Esperan más denuncias
“En la zona del barrio Kuljis hay seis denuncias formalizadas contra ellos. Pedimos que las víctimas sienten denuncia para reforzar el proceso. Lamentablemente la víctima, luego de reconocer a los dos autores, firmó un arreglo, lo que nos deja a la Policía a seguir un caso de oficio, por eso convocamos a los otros afectados a que formalicen sus denuncias. Asimismo, lamentamos que los padres no ejerzan mayor control de sus hijos”, señaló el comandante.
El coronel José Villarroel, director de Diprove, informó ayer sobre la captura en La Guardia de otro adolescente acusado de robar motos a mano armada. Los agentes policiales de ese municipio recuperaron una motocicleta deportiva de fabricación china que el muchacho despojó a un hombre.
La autoridad policial indicó que hay indicios de que el infractor se ha apoderado de varias motos ejerciendo violencia sobre sus víctimas, por lo que la pesquisa se ha ampliado.
Los menores de 18 años que cometen delitos son considerados en las leyes bolivianas como infractores y, por lo tanto, sus procesos penales se ventilan en juzgados de la Niñez y Adolescencia.
En caso de ir detenidos los recluyen en centros especiales, no en cárceles, y, una vez condenados, pasan al reclusorio juvenil Cenvicruz, donde purgan penas máximas de cinco años por más graves que sean sus delitos